Empieza la duodécima semana de preparación, la doceava, como decía un ministro... :) Estamos en pleno ciclo de transformación, la semana pasada fue de choque, la segunda con más kilometraje del plan y a ritmos que van mejorando, y ahora toca una de descarga, que siempre son bien recibidas. Seguirá una más de choque, con la media maratón de Sant Cugat (a la que me acabo de apuntar), una más de carga en la que tendré que hacer una tirada de montaña, y ya nos habremos plantado en las dos últimas del ciclo de realización, que acaba con la maratón...
Pero aún faltan unas semanas para eso. Hay que seguir con el plan, llueva o nieve. Ayer tuve mucha envidia de mis amigos y paisanos Manuel Binoy y Joel Pascual, que disfrutaron de una sesión de running bajo la lluvia en Barcelona. Me fui a dormir con lluvia, soñando que hoy por la mañana aún siguiera lloviendo, y cuando sonó el despertador el crepitar de la lluvia me hizo presagiar que tendría un precioso entrenamiento pasado por agua.
Dicho y hecho, estiré un poco en casa para no estar mucho tiempo parado bajo la lluvia, me iba a mojar igual, pero es menos molesto soportar la lluvia en movimiento que quieto. No era una lluvia muy intensa, a veces las gotas en los ojos acaban fastidiando más de la cuenta, pero no era el caso hoy. El suelo estaba mojado pero no encharcado, la temperatura era buena y la lluvia ligera, así que no había excusas para no correr con alegría.
Aún notaba en las piernas la tirada del domingo, pero en cuanto empecé a correr desapareció cualquier sensación de agujetas o cansancio. En entrenamiento me salió bien, el primer kilómetro calentando a 5:30, y luego mantuve un ritmo constante entre 4:35 y 4:48 hasta el kilómetro 9. Cuando ya salía de la orilla del río cometí un gran error, aún me faltaban más de dos kilómetros y en vez de darme la vuelta y hacerlos por el río, seguí en dirección a Montcada y me encontré con muchos charcos, dejé de correr cómodo, temí mojarme las zapatillas más de la cuenta o resbalarme, así que bajé el ritmo, me lo tomé con calma esquivando charcos e hice los dos últimos kilómetros y poco casi a 5:00.
Al final salieron 11,28 kilómetros a una media de 4:49, esta vez sin pulsaciones, por un problema de sincronización con mi esposa y la colada... La cinta del monitor cardíaco estaba astutamente camuflada entre la ropa tendida, y fui incapaz de localizarla... :)
Excelentes sensaciones, aunque el error de cálculo final con los charcos y la cinta perdida me dejaron mal sabor de boca... Así que mañana habrá que desquitarse, a ver si caen cuatro gotas y unos buenos kilómetros más...
Contra viento y marea, a mi lo de la cinta también me ha pasado alguna vez
ResponderEliminarJajaja... lo de correr entre charcos yo también lo hacía al principio (muy al principio) pero es un peligro eso de ir sorteando, ya que puedes colocar mal el pie y acabar lesionándote.
ResponderEliminarAsí pues, qué mas da! como un niño pequeño chapoteando entre charcos!
No veas cómo disfruto corriendo entre la lluvia ¿ya lo dije?
Esta tarde me he librado de la lluvia, pero en la carretera de Las Aigues me he visto obligado a sortear charcos y barro mucho barro; bien, Isidro, el día se acerca, hay que seguir así de bien hasta el final; lo celebraremos con unas buenas cervezas tras los 42 kilómetros, suerte en el entreno de mañana; un saludo.
ResponderEliminarYo siempre corro por los mismos sitios (me conozco todas y cada una de las imperfecciones del asfalto) y cuando veo un charco que se que no es peligroso me da igual pisarlo. Si no conoces la zona es mejor esquivarlos por si pisas en un pozo.
ResponderEliminarUn saludo!
A veces cuando se empieza a correr todas las molestias desaparecen y encima se llega como nuev@ a casa!!
ResponderEliminarMuy buen entreno,
besos.
Que de aqui en adelante solo sea la cinta o los charcos, lo que te dejen mal sabor de boca, porque será una muy buena señal de que los entrenos van viento en popa. Animos Isidro vamoosssssssss. Un abrazo.
ResponderEliminarQue rápido pasa el tiempo y cómo has mejorado, no en disciplina pero sí en control de ritmos y sensaciones. Te va a salir una pedazo de maratón.
ResponderEliminarTengo una duda, ¿ya llevas 12 semanas? ¿Has contado bien? ¿no estarás contando la semana cero, no?
Me hace ilusión salir en una entrada tuya... la verdad es que últimamente me he mojado dos veces, las dos en mi ciudad, Terrassa, que está al ladito de Barna pero que es muy diferente... las zapatillas, en ambos casos, acabaron completamente chopas...
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