Ese ritmo de trabajo necesita de energía y endorfinas, que por suerte no han bajada durante estos días gracias a que he seguido entrenando y compitiendo... :) Poco después de la Vilatrail, mi clásica entre las clásicas de 10K, la Cursa de Sant Quirze, y digo clásica porque ya es la sexta vez que la corro. Carrera popular entre las populares, poca gente, muy buena organización, butifarrada final, dos vueltas a un circuito de 5K un poco exigente, y como suele ser tradición, un día más bien fresco, ideal para la práctica del running... :) No estoy entrenando con un objetivo definido, estoy haciendo rodajes sueves y algo de montaña, así que llegué a la carrera solo pensando en disfrutar... Y salió bastante bien, la mejor de las 6 que he corrido, en la primera vuelta tuve a la liebres de los 40 minutos a unos 100 metros por delante, pero la segunda ya fue otra historia y no tenía ganas de forzar, así que perdí algo de tiempo, también por el cansancio acumulado en la primera vuelta, y acabé en 41:47, mi mejor tiempo en esta carrera por más de medio minuto.
Salidas por el Besós, subidas al Turó del Pollo, hacia la cruz de Montigalá... Más entrenamientos variados pensando en La Pujada a les Dues Pedres, otra clásica colomense que no me suelo perder. Un circuito con un tramo muy duro, la subida por el camino de la Carrerada, una monstruosidad con una pendiente del 10% que las primeras veces subía a rastras, pero que ahora ya consigo hacer de un tirón aunque sufriendo lo indecible...
El único problema... Que se corre el 25 de mayo... Y aunque muchos pudieron reposar y pasar una noche tranquila el día anterior, yo me sé de uno que celebró la décima con un par de gin Tonics (los dos en media hora, la idea era hacerse el primero cuando marcara el Madrid, y hasta el minuto 93 no pude catarlo...) y más cigarrillos de lo recomendable para hacer una carrera así al día siguiente... :)
Por muy poco, pero mejoré mi tiempo de hace dos años, llegada al sprint incluida, como viene siendo costumbre... :D
Más Besós morning runs, más Pollo-Cruces, algún partido de fútbol, y el sábado pasado por la noche, me atreví con mi segunda Endimoniada, carrera nocturna con salida en Badalona y que recorre algunos de los caminos de los que me estoy haciendo amigo por Montigalá, la Conrería, la Vallensana y la Serralada de Marina. Un recorrido también exigente, can el agravante de la nocturnidad... :) Hace dos años lo pasé muy mal, me vacié en la primera mitad de la carrera y sufrí mucho al final, llegué totalmente desfondado...
Este año, me presenté con una molestia en el empeine, que se complicó días después con un dolor constante en el gemelo, que acabó degenerando en una lumbalgia... La situación perfecta para quedarse en casa reposando... Y reposando estuve el sábado, hasta que llegó la hora de la carrera, me sentí un poco mejor, y cogí los trastos en dirección a Badalona...
Ahí estaba Manu, y ahí se celebraba la carrera...
Otra foto que me hago con el dilatador nasal y salgo con nariz cochinera... :) Y cochinero iba a ser el ritmo en carrera... Calentando noté que las lumbares no estaban en su mejor momento, así que el plan era salir muy relajado, esperar a ver si el dolor cesaba, y disfrutar de una carrera nocturna por montaña, algo que no se puede hacer cada día.
En la foto se me ve entre concentrado y con una mueca de dolor... Y con el dolorcillo completé el primer kilómetro, a 5:06. Normalmente en estas carreras salgo como un burro cerca de 4:00... Pero estaba claro que el sábado tocaba tomárselo con calma...
Comenzó la subida en medio del pelotón, y me empecé a sentir algo mejor. la espalda dejó de molestar, el empeine seguía dando un poco la lata, pero iba bien de cardio y empezó la remontada... A mitad de la primera subida asesina, un miembro de la organización iba cantando el puesto en el que iba cada corredor, el 183 me dijo, lo recuerdo perfectamente... :) Así que comenzó el juego de la remontada, fui recuperando posiciones y contando mentalmente, 180, bajando, 4 de una tacada, ya estamos en 176, dos más, otro que cae, y así sucesivamente... Llego a lo más alto en plena remontada, creo que voy en el puesto 150 más o menos, y de pronto, me pasa un runner y me dice:
"Hey Isidro, ese blog!!!"
¿Comorl? Digo "Hey, quién eres?", pero creo que no me oye, sigo detrás el runner que me reconoció unos metros, recupero alguna posición, y nos vuelven a cantar en qué puesto vamos, el 143 me dicen, vaya, en la subida más dura he recuperado 40 posiciones, parece que no es mala idea salir cochinero y guardar fuerzas para la subida... :)
Hace dos años a estas alturas ya estaba KO, este año, con las molestias a un lado, iba más entero y aún me lancé a cazar algún runner despistado que tenía por delante... :) Un último repechón, que se hizo duro pero no tanto como hace dos años, y ahora sí, bajada a muerte, sigo siendo un poco patoso pero al menos ya no me caigo, :), incluso me puedo permitir el lujo de recuperar posiciones, voy muy entero y disfrutando de la estabilidad de mis zapatillas y la poca técnica de bajada que he adquirido, bajar, bajar, saltar, correr, derrapar, bajar, el grupo se compacta, se forma un trenecito multicolor de runners en un camino en el que vamos en fila... Y bueno, siempre tiene que haber alguno así... Dos tipos se empeñar en ganar alguna posición cuando vamos en fila de uno, a punto de provocar algún resbalón o caída... Seguimos así, con los idiotas molestando al que llevaban delante, entramos en un tramo estrecho de cemento y escalones, hay que andarse con ojo, últimos toboganes, y salimos ya a la civilización, el asfalto...
Y ahí despierta el animal de asfalto con zapatillas de trail... ;) El grupo va estirado, meto una marcha más, y empieza la última remontada, en la bajada he ganado alguna posición, pocas, y en el asfalto empiezo a cazar runners... Uno de amarillo, uno de blanco, uno de azul... Hombre, los dos capullos de antes! Hala, ahí os quedáis, los paso cómodamente, fijo el objetivo en un grupillo que llevo un poco más adelante, les doy caza, entramos ya en los últimos 2 kilómetros, empieza la animación, mucha gente en la calle gritando, cómo se agradece eso, me crezco un poco, intento atrapar a otro runner, le doy caza, siguen los gritos y ánimos, y esto ya se acaba, más gente, más ánimos, ya no tengo a nadie "cazable", sigo corriendo porque los ánimos así lo piden, llego a la meta, y me como el bocata, la coca, la cerveza, el helado y la piruleta como si no existiera el mañana... :D
Al final mejoré mi marca de hace dos años en casi dos minutos, comparo los datos de carrera, y veo que la primera mitad este año la hice bastante más lenta, pero en cambio, la segunda mitad fue un festival de adelantamientos, finalmente acabé en el puesto 123, cuando a mitad de la subida iba en el 184... :)
Me volví a encontrar con el runner que me saludó, charlamos un rato, coincidimos en lo mucho que se disfruta en montaña, es toda una bendición para los animales de asfalto disfrutar haciendo el cabra, y en carreras bien organizadas como ésta lo es aún más.
Ahora a recuperarse bien... La lumbalgia sigue dando un poco la lata...Ya, sí, el reposo es lo mejor... :( Así que hasta que no se vaya toca colgar las zapatillas. Luego vendrán las vacaciones, y en julio ya no hay excusa, a sufrir con los calores veraniegos la preparación de Chicago 2014, mi tercera Major, con muchas ganas de acercarme al 3:10:00, ni se me pasaba por la cabeza hacer un par de años, pero una cosa la tengo clara; para conseguirlo, primero hay que quererlo. Y quiero hacer 3:10 en Chicago. Hala, dicho queda. :)