Esta pasada noche los zombis se me presentaron varias veces en sueños... No dejaban de repetir "to-lu-ca, to-lu-ca"... Eran los zombis layetanos, no hay duda. Ayer descubrí que me estaban pidiendo que fuera al lago Toluca. Esa misma tarde hice una primera aproximación. Y anoche no dejaron de llamarme...
Así que esta mañana, a las 5:40, sonó el despertador, y pese a que ayer por la tarde salí a hacer más de 10 kilómetros, me levanté decidido a acercarme al lago Toluca y descubrir el misterio de los zombis.
Todavía no se me ha ocurrido doblar un día, como hace mi admirado Manuel Binoy. Aunque lo de esta mañana es lo más próximo a haber doblado que he hecho, ya que desde que volví de correr ayer por la tarde hasta que salí esta mañana han pasado menos de 10 horas. La experiencia es muy interesante, me gustaría repetirla más de una vez. Las piernas empiezan cansadas, pero cuando ya se llevan unos cuantos kilómetros el cuerpo comienza a funcionar de nuevo y se van mejorando los tiempos, aunque no he bajado de los 5:00 por kilómetro de media, pero sí en los tramos finales, la carrera de ayer obviamente pesa. Desde luego, si me quedaba algo de mala conciencia por la hamburguesa de ayer, ya es pura historia... :)
Esta mañana fueron algo más de 10 kilómetros, y os enseño primero el mapa para poder explicar mejor lo que me pasó cerca del lago...
Salí decidido a ir al encuentro de los zombis. Ritmo algo lento pero seguro. Sólo una parada en el semáforo que hay al final de la cuesta de Universal Hollywood Dr. Encaro Cahuenga Blvd. Giro a la derecha en Valley Spring Ln. Giro en Navajo rodeando el lago. Un tramo por Forman Av. Y ya por fin en Toluca Lake Ave. Ayer ya descubrí que por esa calle no se podía acceder al lago, así que encaré Clybourn Ave, por donde supuestamente podría cruzarlo, en dirección sur, con el corazón encogido, los nervios a flor de piel y un frío sudor que se apoderó de mí... Llegué al final... Y vaya, había una valla. Primer intento fallido... Volví sobre mis pasos y lo intenté por S Valley St, pero nada, cortado igualmente. Al llegar al final del callejón me sentí observado. No se veía un alma por la zona. Antes sí que me crucé con algún corredor y algún ciclista despistado. Pero en la zona del lago no se veía a nadie por la calle. Las ventanas estaban todas cerradas y con las cortinas bajadas... Pero en varias de ellas noté que había alguien detrás que me observaba fijamente...
Tomé S Rose St con la intención de acercarme al lago desde el Este, pero tampoco hubo suerte. En Franklin Ave, cortada a la altura del lago, una especie de cuervo me sobrevoló dos veces y no dejó de graznar hasta que me fui. Y en Hood Ave pude ver el lago de lejos, a través de una valla que impedía el acceso a él... Lo miré unos segundos... Y cuando me di la vuelta, se me heló la sangre... Una vieja furgoneta blanca, con los cristales oscuros, exactamente el tipo de furgoneta que conducen los zombis en las películas de zombis, estaba en la entrada de la calle... No pude distinguir quién había dentro... Estaba parada con el motor en marcha... Salí corriendo sin mirar hacia donde estaba, vi que los que estaban dentro giraron la cabeza al verme pasar y murmuraron algo, y afortunadamente ahí se quedaron...
Definitivamente, no hay manera de acceder al lago. Sólo pueden hacerlo los habitantes de las casas que lo rodean. Casas preciosas, con banderas americanas, bonitos jardines... Pero habitadas por zombis... Ahora estoy seguro de ello... Me temo que en el lago es donde conservan los restos humanos de los que se alimentan... Por eso está tan protegido... Todavía no sé a qué me enviaron los zombis layetanos al lago Toluca. Mañana es mi último día, debo cumplir mi misión, pero aún no sé cuál es... Espero que esta noche vuelvan a comunicarse conmigo y me lo digan...
Zombis aparte, el entrenamiento me ha dejado muy satisfecho, me he pegado un desayuno de campeonato y ahora me voy a la feria, a ver si bato otro record del mundo... Unas fotos haciendo el Willy con Kinect... :)
Pero esto qué es? Qué hace esa gente en la foto, están bailando?
ResponderEliminarJo Isidro, veo que los zombis te siguen a todas partes y por encima tú vas a buscarlos al lago ese... qué locura! :)
El de rojo soy yo... Y estamos conduciendo... Aunque el volante hay que imaginárselo... :)
ResponderEliminarJoder, Isidro; por un momento me has hecho creer que los tipos de la furgoneta iban a secuestrarte y a pedirme a mí un rescate por tu libertad, cosa que hubiéramos solucionado en menos de cinco minutos; lo has descrito perfectamente: los zombis estaban ahí, en el lago, esperando y deseando que entraras; ya tenemos ganas de que vuelvas a correr por tu zona habitual; América es peligrosa y los cuervos que vuelan por allí no son los mismos que vuelan por aquí; vete con cuidado y regresa pronto, un saludo y muchas gracias por todo, nos leemos.
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