La mañana empezó a las 5:00am. Empezando a correr a las 8:30am, una de las lecciones que tengo aprendidas es que debo desayunar unas 3 horas y media antes de la carrera, y que he de tener tiempo suficiente de hacer al menos tres visitas al señor Roca. Me levanté con muchas ganas de que hoy fuera un gran día, en especial para Manu, que no tuvo que insistirme mucho para que intentara acompañarle en su reto de bajar de las 3 horas y media, lo he hecho con toda la ilusión del mundo y egoístamente para poder saborear con él el momento.
Desayuno de muesli, yogur desnatado y zumo de naranja, de postre, dos galletas con chocolate y café, y a hacer los deberes por partes... La última parada en boxes, ya con la ropa puesta, y a las 6:50am ya iba camino del metro, disfrutando ese lujo que supone desayunar en casa, coger el metro e irse a correr una maratón.
Ahí estaban ya Manu, Toni y unos amigos de ellos que también le dan fuerte a las zapatillas, sobre todo por la montaña.
La maratón de Barcelona es cara comparada con otras, pero es muy difícil encontrar quejar sobre la organización, falta de agua o avituallamientos o problemas con el guardarropa. Hoy, de nuevo, todo perfecto. A las 8:00am ya estábamos listos, salíamos con la segunda oleada, en el cajón de 3:15-3:30, así que íbamos a ser los "lentos" de la manada. Muy bien la entrada en los corrales, civismo entre los corredores, y caminando, a las 8:34am, cruzamos la línea de salida, comentando en broma que hasta dentro de 3 horas y media ya no podíamos volver a caminar, ahora se trataba de correr. Última parada en el muro de las micciones, antes de entrar en los corrales... :)
En la salida ya hacía calor... El pronóstico del tiempo, terrible para el corredor, pero estupendo para el público. Se notó, en mi cuarta maratón de Barcelona, ha sido en la que más he sentido el apoyo de mis conciudadanos, mucha gente durante toda la carrera, muchos ánimos, aunque todavía tenemos en Barcelona una asignatura pendiente que es el incivismo de los que cruzan de lado a lado de la carrera de manera muchas veces imprudente...
Había que medir los tiempos con mucho cuidado, ya que nada más salir, tuvimos que parar a orinar, serían los nervios o la hidratación pre-carrera, pero el caso es que en el segundo kilómetro hicimos una rápida parada en boxes... Acción sincronizada, y de vuelta a la carrera, perdimos poco tiempo y seguimos al ritmo marcado, todavía quedaba muuuuuucho por delante. Los primeros kilómetros, intentando minimizar el desgaste y robando segundos al ritmo de 5:00 min/km, pasamos por el 5 en 24:51, penalizados por la meada, hicimos los 5 siguientes en 24:14, robando más segundos al crono, y del 10 al 15 en 24:46. El rimo medio, más o menos de 4:55 min/km, sin sufrir y guardando segundos que iban a hacer falta cuando subiera la temperatura.
Alrededor del 16, otro incidente urinario... :) Segunda parada en boxes, esta vez me alargué un poco más, le dije a Manu que siguiera y que ya le alcanzaría. Era justo cuando empezaba la subida por la Meridiana, así que, literalmente, se me hizo un poco cuesta arriba. En ese momento no se me pasaba otra cosa por la cabeza que recuperar esos 30 segundos perdidos en el proceso de micción, así que puse el turbo, y durante casi 4 kilómetros subí más o menos a 4:35 min/km, viendo falsos Manus hasta que por fin atrapé al verdadero cuando faltaba poco para pasar por la media... :D Del 20 al 25, meada incluida, 24:27. Seguíamos rascando segundos. El paso por la media queríamos que fuera alrededor de 1:42:30, llevar dos minutos y medio de margen. Al final pasamos en 1:43:19, pero no hay problema, teníamos casi dos minutos de colchón, ya habíamos parado dos veces en boxes y el desnivel de la carrera a partir de entonces era favorable. Al pasar por el 22, que salió casi a 4:30 min/km, ya teníamos casi esos dos minutos y medio de margen, y las fuerzas estaban muy bien. Pero ya empezaba a notarse el calor...
Del 20 al 25, el perfil favorable nos llevó a completar ese tramo en 23:56, un minuto más de reserva. Manu iba muy bien, yo tenía mis dudas, sobre todo tras el esfuerzo en la subida, pero las piernas respondían. Hicimos los deberes con la hidratación, yo fui consumiendo geles a mi ritmo habitual, cada 7 kilómetros. En el kilómetro 25 el sol ya era una realidad, y nos acercábamos al tramo probablemente más decisivo de la carrera... La eterna subida por la Diagonal hasta Glorias, en ligera ascensión, media vuelta, bajar lo subido, y pasar el psicológico kilómetro 30. El calor se notaba, decidimos ser conservadores en la subida y recuperar en la bajada, para ver cómo llegábamos al 30. Llegamos desde el 25 en 24:48, aún rascando segundos al ritmo de 5:00 km/min.
Y a partir del 30, ya sabéis... Empieza la maratón. En ese punto noté que no estoy en mi mejor momento, obviamente... Le dije a Manu que si no podía seguir el ritmo que el necesitaba, le haría una señal y le desearía suerte... Y no, no podía con el ritmo de 4:55 min/km... A nuestro alrededor, empezaban a verse los primeros walkers... Todos estábamos sufriendo el ataque combinado del tío del mazo y el Lorenzo, en forma de subida de pulsaciones y de carencia de glucógeno. Sin necesidad de decirlo, las piernas nos recomendaron bajar el ritmo, y empezar a canjear esos segundos de margen a cambio de llevar un ritmo en el que el desgaste fuera menor durante los 12 kilómetros que quedaban, la verdadera maratón. Aunque suene cruel, ver corredores caminando a veces es una señal positiva de que lo estamos haciendo bien, no podemos ir al mismo ritmo con 10 grados más de temperatura y 30 kilómetros en las piernas... Seguimos bien, regulando el esfuerzo, y casi se nos pasó volando el tramo del 30 al 35, sin señales del tío del mazo y peleando contra el Lorenzo, en 25 minutos y 20 segundos. Sólo sacamos 20 segundo del colchón, y ya estábamos en la parte final. Las caras de preocupación se convirtieron en sonrisas de complicidad... Todo pintaba muy bien, estábamos plantando cara al calor y manteniendo un ritmo que nos podía llevar al 3:30.
A partir del 35, curiosamente, muchos menos walkers. No nos mordió ninguno y seguíamos intactos... :) Ya habíamos dejado atrás el desolador litoral y corríamos por el centro de Barcelona, mucha más animación, mucha más gente, en el 37, estaba mi señora y mis cachorros, los vimos, las sonrisas de un niño animan a cualquiera, y seguíamos a un ritmo casi clavado de 5:00, adelantando casi constantemente corredores, dándonos ánimos, recordando, "cabeza, cabeza, ahora cabeza"... Algún kilómetro en bajada incluso salió alegre, mucho ambiente en Puerta del Ángel, Plaza Cataluña, ya vemos el Paralelo, la última prueba... Empezamos a subir y pasamos por el 40, hacemos esos 5 kilómetros en 25:18, genial, sólo 18 segundos a crédito.
Las dudas sobre si llegaríamos se convierten en ánimos, en mini retos, decimos, el Paralelo hay que subirlo con todo, ¡si podemos a 5:00, a 5:00, a 5:15 ni soñarlo! Y sí, subimos muy sueltos, adelantando, vuelven los walkers, el sol a todo lo que da, pero cuando tu objetivo está a tu alcance, quién dijo sol o quién dijo cansancio!!! El Forerunner y la web de la carrera lo dicen claro, subimos el Paralelo a menos de 5:00 km/min, felices, sonriendo, celebrando que sí, que hoy era el día del sub 3:30. El colchón era suficiente para bajar holgadamente, se acaba el Paralelo, giramos hacia Plaza de España, apretamos un poco más, ahí está la meta, le pregunto a Manu si quiere entrar solo o juntos, me dice que juntos, apretamos un poco más, coge a su hijo de la mano, que nos aguanta el ritmo muy bien, y sí, entramos juntos, emocionados, en 3:28:19, su mejor marca personal, un merecido sub 3:30.
Pocos segundos después, más que satisfecho y contento por esos kilómetros que compartimos, si tenía alguna duda sobre haber corrido hoy o no, el más mínimo atisbo se esfumó tras el abrazo que nos dimos, ver a un amigo así de feliz y haber podido ayudar aunque haya sido solo un poquito, no tiene precio...
Lo volvería a hacer otra vez y mil veces más... Como sé que casi todos los habríais hecho...
Ah, Toni, en su línea... 3:04, qué tío... :)
Congratulations!
ResponderEliminarAhora, a descansar y a dejar la cabeza en blanco un par de días hasta el siguiente objetivo.
Enhorabuena por el tiempo tan magnífico que has realizado, espero de corazón que las molestias por la sobrecarga en tres maratones se pasen rápido y, por supuesto que habrá valido la pena, pero ahora viene la parte dura que es la "evaluación de daños".
Un saludo y buen trabajo campeón.
Halaaaaa, muchas felicidades! sin duda, poder compartirlo con un amigo no tiene precio! yo estoy deseando acompañar a una amiga en una media maratón el 6 de abril, me hace tanta ilusión! eso sí loquito, te has ganado un descansito, crees que podrás tomártelo? jajaja
ResponderEliminarBuena guinda a tu particular pastel de este año.Enhorabuena
ResponderEliminarTienes una cabeza a prueba de bombas. Yo a tres semanas de una maratón aú no soy persona. Si me interroga la CIA a tres semanas de maratón lo canto todo. Enhorabuena, otra más.
ResponderEliminarHas cumplido a la perfección la labor de liebre de lujo y con dos maratones en 3 semanas ....
ResponderEliminarEnhorabuena campeón
No tengo palabras, evidentemente sois de otra pasta.Felicidades por esa carrera que manejásteis muy bien,a pesar de las paradas en boxes.Con relación a tí, que decirte....impresionante, enhorabuena.Un abrazo
ResponderEliminarQue ganas tengo de que llegue el Maratón de Madrid y poder vivir un Maratón desde una perspectiva menos sufrida y más emocionante.
ResponderEliminarEnhorabuena Isidro te ventilas los Maratones que da gusto.
Correr una maratón para hacer de liebre, es todo un detallazo! con el esfuerzo que supone terminarla, añadirle que se hace por ayudar a alguien a mejorar su marca, es grande! y como guinda, disfrutar del final acompañados. Felicidades!
ResponderEliminarMuchas felicidades, hacer de liebre es un lujo
ResponderEliminarCasi como si hubiera estado ahí. Esta crónica como siempre en todas las que nos compartes, transporta a la carrera misma. ¡Sensacional!
ResponderEliminarDos maratones espalda con espalda se dicen fácil, pero no lo son. Ahora, un largo descanso activo es no solo merecido sino casi obligado. Que si no, se paga tarde o temprano. Más vale.
Saludos desde México
www.cronicasmaratonytriatlon.blogspot.com
Muchas felicidades!!!! La victoria de otro también se disfruta y mas cuando sabes que le has estado apoyando.
ResponderEliminarAunque él ya sabía lo que hacía se buscó una buena liebre...Enhorabuena!!!!
Aupa!!!
ResponderEliminarPues como se suele decir, que te quiten lo bailao!!!!
A veces la satisfacción nos llega por los logros de otros, pero las,saboreamos como nuestras!!!!
¡Qué GRANDE eres Isidro! Enhorabuena crack
ResponderEliminarEs un poco locura pero la causa lo merecía. Supongo que eres consciente de que ahora mismo 3:30 lo haces con la gorra.
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