Tabs

domingo, 19 de diciembre de 2010

Crónica de la Mitja de Vilanova

Hoy tocaba el ataque a la media maratón. Se acaba el 2010, he corrido mucho, mi primera maratón, seis medias maratones, incluída ésta última, 11 10K y me falta la Sant Sylvester de Barcelona, y dentro de una semana haré una 5K, la Sant Sylvester del Masnou.

Han sido muchos retos y muchos momentos especiales; una maratón que acabé vivo y un poco mejor que mis previsiones iniciales, el sub 40 en los 10K y una marca en media que, después de haber corrido ya varias, creo que podía mejorar bastante...

Así que ése era mi reto de hoy. Cuando estaba acabando la maratón del Mediterrani ya pensaba en la de Barcelona, he comenzado ya mi plan para la próxima cita con los 42K, y visto lo bien que me fue en los siguientes 10K, sin dejar de lado el plan de preparación de la maratón hoy quería hacer la media con el cuchillo entre los dientes. Respetando el plan y observando las recomendaciones de Jack Daniels, la semana previa a la media hice 80 kilómetros, concentrados sobre todo al principio de la semana, de manera que el viernes descansé y el sábado hice sólo 10, pero los 70 restantes obviamente pesaban un poco.

El esfuerzo para correr una media a tope es duro, muy duro. En una 10K vamos a morir, reventando nuestro umbral anaeróbico, pero llega un momento en el que no podemos correr más, y al final, en bastante menos de una hora, medio asfixiados, pero hemos acabado. La maratón la corremos de manera totalmente aeróbica, es una prueba de resistencia, el sufrimiento es mental, el cansancio hace mella, el muro puede dejarnos derrotados, pero corriendo con cabeza y un buen entrenamiento, y por supuesto sufriendo cuando toca, es un placer acabarla.

Pero correr la media maratón a morir significa ir durante alrededor de una hora y media con el cuerpo al límite, alargando la agonía que supone correr coqueteando con nuestro umbral anaeróbico y viendo como cada kilómetro que pasa no es una décima parte de la carrera, sino que es una veintiunava parte del total...

Con esa idea en mente, me levanté a las 6:00am pensando que podía ser un día duro pero gratificante. Íbamos a ser 4 cobardes, Toni, Manu, David y yo mismo. Me comí un buen plato de pasta con zumo de naranja, dos galletas con chocolate y un café, pensando en ir bien alimentado y con tiempo de hacer la digestión, y pensando también en que el punto 8 fuera correcto. Dos sesiones de punto 8, mochila y ropa preparada, y a las 8:00am llegaban Manu y David en coche para ir camino a Vilanova.

Caían cuatro gotas, la experiencia me dice que hay un día al año que siempre llueve, y ese día es el de la Media Maratón de Vilanova. No era muy intensa, durante el camino cayeron cuatro gotas mal contadas, mientras recogíamos el dorsal también, pero antes de empezar dejó de llover y el cielo quedó encapotado y la temperatura era la ideal para correr. Dorsales, un tercer punto 8, y la foto de rigor.





Pensando en la que me esperaba, quería ir a por todas, me comí una barrita energética rara que compré cuando fui a por mis Brooks. Ah, por si había alguna duda sobre mis intenciones, me puse las New Balance mixtas, más ligeras que las Brooks de entrenamiento, para buscar arañar algún segundo más... La barrita era fina, pero densa, muy densa, me parecía estar comiendo algo concentradísimo, costaba masticar, y me dejó una sensación parecida a haberme comido otro plato de pasta...

Calentamiento, buscamos una posición adecuada en la salida, ni delante del todo ni a la cola, algo de nervios, y a esperar la salida. El plan era ir con Toni lo que el cuerpo aguante. Recuerdo que Toni es un fuera de serie, en Ripoll bajó los 1:30:00 en una carrera con un perfil muy duro... Intentaríamos encontrar un ritmo rápido que nos fuera bien, pero le dije que si yo no podía seguirlo ya nos veríamos a la llegada... :) Manu y David iban más tranquilos, era la primera media maratón de David, y Manu iba a acompañarle para hacer su tirada larga de la semana.

Salimos con bastante tráfico, así que no pudimos ir muy rápido mientras esquivábamos gente. Primer kilómetro, 26 metros de subida, mucha gente... A 4:17... Parece que había ganas de correr...

Hasta el 9 nos vamos moviendo, en función de la pendiente, ya que había bastante desnivel, a ritmos de 4:02, 4:07, 3:56, 4:12, 4:04, 3:58, 4:07 y 4:07... Miro el Forerunner y no me lo creo, no me parece ir tan rápido, tengo a Toni unos 10 metros por delante hasta que lo alcanzo sobre el kilómetro 7 y vamos juntos durante un tramo.

Vamos a hacer el décimo y decido tomarme un gel, me estoy dando mucha caña y aún queda mucha carrera. Entre el gel y el lío del avituallamiento, y un desnivel de 14 metros, el décimo kilómetro sale a 4:15.

Ya llevo media carrera, estoy bastante por encima del ritmo medio necesario para mejorar mi marca, pero el caso es que voy muy bien, no me siento cansado, Toni se me ha vuelto a separar un poco pero sigo con mi carrera y me siento bien, voy fuerte y regulando el fuelle para dar todo lo que puedo dejando un poco para después.

Pero sobre el 10,5, prácticamente a mitad de carrera, empiezo a notar algo extraño. Noto un pequeño dolor en la parte baja del estómago, nada relacionado con el punto 8, obviamente, tampoco es flato. Es una sensación muy extraña, como si el estómago se me contrajese, parecía que tenía un alien dentro, y esa molestia no me dejaba correr cómodo.

El ritmo en los siguientes kilómetros bajó un poco pero seguía siendo muy bueno para mis planes. 11, 12 y 13 a 4:17, 4:19 y 4:23. Bajando poco a poco el ritmo mientras la molestia subía también poco a poco...

Pienso que debe ser algo pasajero, en esos momentos empiezo a pensar en el pedazo de desayuno, en la barrita concentrada y en el gel que me acababa de tomar. Creo todo eso que se juntó en el estómago y el esfuerzo que estaba haciendo se confabularon para intentar derrotarme... :(

En el kilómetro 14 empieza la parte más dura de la prueba. El dolor está en su apogeo, y el desnivel en ese kilómetro es de 28 metros de subida. En esos momentos me concentro en mover las piernas, pasos cortos, respiración intensa, pisada fuerte... 4:35.

Seguimos subiendo. 29 metros más de desnivel. Kilómetro 15 a 4:44. El dolor parece que empieza a bajar... Creo que lo más inteligente que he hecho hoy ha sido no tirar la toalla, empezaba el kilómetro 15 pensando que todo lo que había ganado en la primera mitad no me iba a servir para nada, me veía acabando sin mejorar mi marca, entrando casi a rastras a meta, incluso me visualicé parando en la cuneta... Pero creo que esa subida incluso me ayudó, el cambio de ritmo, correr más con piernas que con corazón, la respiración más intensa y no tan profunda posiblemente reequilibró mi organismo, el estómago dejó de quejarse, las piernas aguantaban bien y los pulmones también...

En el 16 todavía hay 16 metros de desnivel, y lo hago a 4:35. Pero ya me siento mucho mejor. He perdido mucho tiempo en esos últimos kilómetros pero también lo he ganado al principio. Entonces pienso, tío, has venido a correr, no pasa nada, ya pensaremos qué ha pasado, pero tío, si aprietas todavía puedes hacer una buena carrera, no hay dolor, al pasar el cartel del 17 te quedan sólo 4, las piernas están bien y el corazón también, la cabeza no te puede fallar ahora tío, concéntrate en correr y piensa en la meta, que está aquí al lado, ¡vamos!

Y llega el subidón... El 17 es de bajada y lo hago a 4:20. ¡Vuelvo a ser yo! Intenté no pensar en las pájaras de las medias de Terrassa y Sitges, acabé fatal, a más de 5:00 el kilómetro hasta llegar a la meta. Pero esta vez no iba a ser así, todos esos madrugones, todas esas series y fartleks, las canciones que compré en iTunes para motivarme, mis zombis, los amigos que me leen y a los que leo, ¡¡¡no podía fallar!!! Empiezo a adelantar gente...

El 18 es de toboganes, subimos 35 metros y bajamos 26. 9 metros de desnivel ascendente, 18 kilómetros en las piernas, el ataque del alien estomacal, pero no dejo de adelantar gente como una moto, pisada fuerte, respiración acompasada, y 4:26.

Chaval, te quedan dos kilómetros, estás recuperándote, pero aún puedes dar más, vas fuerte, venga, ¡que se note!

En el 19 por fin bajamos un poco. 4:09. Ya no hay dolor, sólo ganas de correr, las piernas pisan fuerte, los brazos ayudan, la cabeza ya sólo piensa en correr más y más y sigue adelantando gente.

No veo la señal del kilómetro 20, quizá no estaba, no importa, ya estamos llegando, el 20 es plano, y sale a 4:17. No dejo de adelantar gente, voy bien, muy motivado, con ganas de recuperar lo perdido, pisando aún más fuerte.

Miro el Forerunner. La MMP está en el bolsillo. El 1:30:00 no... Decido empezar a correr todo lo que puedo sin mirar el reloj, toboganes, no ayudan mucho después de 20 kilómetros, el balance vuelve a ser negativo para las piernas, desnivel de 5 metros de subida, y lo hago a 4:19.

Ya estamos llegando, una curva y entramos en el estadio, miro el reloj y veo que el sub 1:30 no será hoy, pero que a mi marca en media maratón le pego un bocado de más de tres minutos. Aprieto lo que puedo, y el último pico me lo marca el Forerunner a 4:20, teniendo en cuenta que en pocos metros se acumula un desnivel de 13 metros de ascensión.


Al final, 1:30:31, que significa correr algo más de 21 kilómetros a 4:18 el kilómetro. Que no ha sido así, han sido algunos más rápidos, otros mucho más lentos, mucho sufrimiento, un momento psicológicamente muy duro, un contratiempo inesperado, la superación de posiblemente mi peor momento físicamente hablando en una carrera popular, pero una alegría inmensa cuando he empezado a ser consciente del crono...

No, no voy a permitir que esos 31 segundos empañen el día de hoy. Me hubiera gustado hacer 1:29:50, o mejor, 1:28:30, pero mi 1:30:31 lo recordaré durante mucho tiempo porque me ha costado auténtico sufrimiento. Tenía la espinita de esas medias maratones en las que pinché hasta el final, y una marca que creía que podía superar bien. Ahora he corrido una media mirándola a los ojos, saliendo a sufrir y sufriendo, luchando contra lo inesperado y levantándome cuando casi me dejan KO. cada prueba tiene su encanto. Y el de la media también es único...

Ahora, la cara de MMP y el dedo de Toni... :)





Y la foto de familia de después de la carrera.



18 comentarios:

  1. Buena carrera Isidro. A simple vista parece que esa primera mitad tan hiperrápida te pasó factura. La próxima que sea sin toboganes y por mucho bajarás de 1.30.

    ResponderEliminar
  2. Enhorabuna..creo que has conseguido una gran marca.Y seguro que en el futoro bajaras la marca de 1.30, en realidad lo tienes ahi.
    Yo hoy he corrido la media de Paiporta-Picanya, ni mucho menos a tu tiempo(1:48).Pero he terminado contento.He realizado dos medios en menos de un mes,uno de mis objetivoes este año.Pronto,nuevos retos

    ResponderEliminar
  3. Muy buena carrera, estás entrenado maratones si te centras en la media mejorarás la marca y mucho

    ResponderEliminar
  4. Todo un figura... Que tiempazos niño, envidia me dais (sana, eh). Felicidades!

    ResponderEliminar
  5. Muy bien. Ya verás como ese 1:30 pronto lo dejarás atrás. Sólo es cuestión de entrenar.
    ¿No te dije que en torno al km 12 o 14 a uno le parecen que las fuerzas flaquean? También te aconsejé que no te vencieras. Es como un pequeño "muro" que si lo pasas sin aflojar ritmos consigues llegar a meta rompiendo marcas.

    Por otro lado ¿sois capaces de meteros tanta comida sólo unas horas antes de salir a competir?

    ResponderEliminar
  6. Que ganas tenia de leerte! Enhorabuena! menudo final de año!!! este crono no te durara nada....lo machacas a la proxima!!!
    Me alegro "cobarde".
    Como te habra sentado de bien ese pitillo de despues, eh?? ;D hehehe !

    ResponderEliminar
  7. Ya te lo he comentado antes.. Pero te lo repito... Realmente vas lanzado...!! Este 2011 puede ser tu gran año... Sigue así...!! Felicidades..!!

    ResponderEliminar
  8. Hay que estar muy fuerte para hacer eso que has hecho. Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  9. Estás muy fuerte, estoy con Carles, el 2011 puedes romper todos tus cronos, los buenos entrenos siempre salen a relucir, felicidades.

    ResponderEliminar
  10. Felicidadessssssssssssssss. Con las penurias que has pasado y hacer 1:30:31 es que tus piernas tienen mucho más. Además siguiendo el entrenaiento de J&B tu límite está mucho más abajo.
    Ahora sólo esperar que tengas un buen día y que tiemble el Gebre!!!.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  11. Una marca realmente mareante. Esos ritmos son totalmente irreales para mí. Estás que te sales, vaya añito.

    Muchas felicidades.

    ResponderEliminar
  12. Sin duda, felicitaciones por la marca a pesar del sufrimiento. La marca sólo es un número, la experiencia vivida es lo que realmente cuenta. También vale, y mucho, para la próxima maratón.
    Tanto en BCN como en Gavá (no sé si las correrás) tienes dos buenas oportunidades planas para intentar mejorar el tiempo si así lo deseas...

    ResponderEliminar
  13. ¡Felicidades por la MMP!

    Para la próxima no comería tanto y mucho menos me tomaría un gel. Yo para las medias desayuno exactamente lo mismo de siempre, con cenar bien es suficiente. Lo único que hago diferente es beber más agua. :)

    ResponderEliminar
  14. Si es que con ese perfil que cuentasd, lleno de toboganes, lo tuyo es un tiempazo... en una carrera algo más llana te sales y pulverizas ese 1,30

    ResponderEliminar
  15. Fenomenal carrera una pena lo del alien, si no bajas de 1:30 fijo.

    ResponderEliminar
  16. Felicidades por tu marca!!Seguro que este año que vienes la bajas de nuevo!!
    Salut

    ResponderEliminar
  17. Que buen post, que buena media y que buen desayuno te pegaste, jejjeje puede ser que de hay te vengan los males, yo suelo desayunar el día de carrera lo mismo que el resto de días, un abrazo y esa 1h 30min esta al caer.

    ResponderEliminar
  18. Carreron Isidro! Estas mas cerca del 25 que del 30. Es grato comprobar como los duros entrenos dan resultados! Enhorabuena!
    Un saludo!!

    ResponderEliminar