Ayer decía en broma que a este paso me tocaría salir a correr con nieve, y hoy podría haber sido el día. Esta mañana cayó una llovizna de agua-nieve, pero afortunadamente cuando salí a hacer series ya sólo quedaba el frío y un ambiente bastante húmedo. El frío con nubes e incluso humedad se aguanta mucho mejor que el frío seco. Obviamente si vas bien abrigado...
Hoy volví a las series, me he notado mejor que la semana pasada. Con el Runkeeper no puedo ver bien a qué velocidad exacta voy, a ver si invento algo para conseguirlo. Según el mapa y la velocidad, creo que iba a unos 3:50 Km/m las dos primeras, más o menos a 4:00 las tres siguientes y ya no pude bajar de 4:30 las dos últimas. Ahora me queda por saber la frecuencia cardíaca a la que voy, que es el mejor reflejo del esfuerzo, así que no he podido resistir la tentación de comprarme hoy un Polar TS4. Es el modelo más sencillo que tienen, por ahora no tengo curiosidad en que el trasto se invente las calorías consumidas o que me haga planes de esfuerzo. Con el Runkeeper puedo controlar las series y el kilometraje, y también se inventa cuántas calorías consumo, así que usaré el Polar sólo como referencia del ritmo cardíaco. Mañana lo estrenaré, para ver cómo funciona, y buscaré un buen momento para hacer una prueba de esfuerzo y ver cuál es mi frecuencia cardíaca máxima para luego ir regulando en los entrenamientos.
Mañana tengo la intención de rodar algo más de 10Km. El domingo es la Mitja de Gavá, así que la semana que viene creo que saldré sólo martes y jueves. ¡A ver si estos días de entrenamiento han servido para algo!
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